ENZYMAS DIGESTIVAS 100 caps. SURAVITASAN
Enzymas Digestivas es una combinación de pancreatina (extracto de glándulas pancreáticas que contiene proteasas, amilasas y lipasas), betaína (fuente de HCl extraída de la remolacha), extracto de bilis de buey (con alto contenido en taurina), papaína (extraída de la papaya) y pepsina (enzima digestiva).
Sin gluten, Sin lácteos
Origen animal: pancreatina porcina, pepesina porcina, bilis de buey
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Información del producto
PANCREATINA: Es una preparación de enzimas pancreáticas aisladas a partir de páncreas de cerdo fresco. La pancreatina se utiliza para reemplazar las enzimas digestivas cuando el páncreas no produce suficiente por sí solo. Ciertas condiciones médicas pueden causar esa falta de enzimas, incluyendo fibrosis quística, inflamación crónica del páncreas, cáncer de páncreas o cirugía del páncreas. La pancreatina también se puede utilizar para tratar una condición llamada esteatorrea (heces sueltas y grasosas) (1,2). La pancreatina aporta amilasa, proteasa y lipasa:
Amilasa: interviene en la descomposición de las moléculas de almidón e hidratos de carbono en azúcares más pequeños. Los diferentes tipos de amilasas disocian las moléculas de diferentes tipos de azúcares, la lactasa disocia la lactosa (azúcar de la leche), la maltasa disocia la maltosa (azúcar de malta) y la sucrasa disocia la sucrosa (azúcar de caña y remolacha) (3-5).
Proteasa: interviene en la digestión de las proteínas y su descomposición en aminoácidos simples. Las proteasas, así como otras secreciones digestivas, son responsables de mantener el intestino delgado libre de parásitos. La falta de proteasa aumenta el riesgo de infección intestinal. Incluye tripsina, quimotripsina y carboxipeptidasa (6,7).
Lipasa: junto con la bilis interviene en la digestión de las grasas. La deficiencia de lipasas pancreáticas resulta en una mala absorción de grasas y vitaminas liposolubles. La acción de la pancreatina se ve favorecida por la presencia de las enzimas betaína, pepsina A y papaína (8,9).
BETAÍNA: es una gran fuente de ácido clorhídrico. Las células del estómago secretan betaína, pero muchas veces no lo suficiente. La betaína HCl no se encuentra en los alimentos, pero el HCl es esencial para descomponer grasas y proteínas. La presencia de este ácido provoca que el pH del estómago alcance niveles muy bajos (pH 1-2) necesario para su óptimo funcionamiento. Con base en la experiencia clínica, estas fuentes complementarias de ácido clorhídrico a menudo alivian los síntomas de la acidez y mejoran la digestión en personas que tienen hipoclorhidria y síndrome del intestino corto (10). Diferentes estudios afirman que la betaína es necesaria para el metabolismo (absorción) de proteínas, calcio, vitaminas B12, hierro y zinc. También esteriliza los alimentos en el estómago, permitiendo digerir bacterias y microorganismos. Así pues, ayuda a mantener la función normal del estómago, particularmente en personas que producen escasos niveles de ácido clorhídrico (hipochlorhidria y achlorhidria). Se sabe que, con la edad, la producción de ácido clorhídrico disminuye de forma notable a partir de los 30 años de edad, pudiendo provocar acidez gástrica y reflujo, carencia de vitamina B12 y minerales como calcio, hierro (anemia) y zinc, mala absorción de proteínas, alergias alimentarias y otras muchas más consecuencias (11).
EXTRACTO DE BILIS: contiene un alto contenido de taurina. Es un excelente complemento para la producción y funcionamiento de la bilis. Mejora la digestión de la grasa, ayudando al cuerpo a absorber vitaminas A, D, E y K solubles en grasa. Inhibe la formación de cálculos biliares (colelitiasis) y participa en la eliminación de radicales libres, responsables del envejecimiento (12). También desempeña un papel en la modulación de la concentración de calcio libre intracelular, y aunque es uno de los pocos aminoácidos no incorporado en proteínas, la taurina es uno de los aminoácidos más abundantes en el cerebro, la retina, el tejido muscular y órganos en todo el cuerpo (13,14).
PEPSINA A: es una enzima digestiva que se libera en el estómago como pepsinógeno. La liberación de ácido clorhídrico estimula la liberación de esta forma básica de la pepsina a niveles de pH muy bajos. Su función principal es descomponer las proteínas en péptidos (15). Se utiliza como coadyuvante de la pancreatina y de las sales biliares en la deficiencia de secreciones pancreáticas.
PAPAÍNA: proviene de la papaya. Digiere las proteínas en péptidos o, incluso, en aminoácidos, estimulando los jugos pancreáticos para una mejor digestión de proteínas. Se ha demostrado que puede digerir gluten de trigo y hacerlo inocuo en personas con enfermedades celíacas (16).
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